Según estadísticas, el promedio de divorcios en América Latina y Estados Unidos es entre un 40%-50%. Esto quiere decir, que por cada 2 parejas que se casan, 1 se divorcia. Entre las principales causas de divorcio se encuentran los problemas financieros. ¿Qué hacer para evitar que los problemas financieros arruinen tu vida amorosa?.
Acá te dejo 5 consejos prácticos para que esto no ocurra:
- Sean estrictamente ordenados con sus finanzas familiares: muchos de los conflictos hogareños por temas de dinero se centran en la falta de control, la escasez de información y la falta de transparencia en el manejo de las finanzas por parte de ambos miembros de la pareja. Cuando hay desorden y falta de información se genera un ambiente de duda, de cuestionamientos mutuos y de estrés. Esto se evita cuando somos conscientes de que las finanzas son un área que requiere orden y disciplina, pero sobre todo transparencia. La herramienta por excelencia para hacer de esta labor algo sencillo y práctico es el Presupuesto Familiar. Utilizar el presupuesto ayuda a ordenar, direccionar y controlar el dinero que ingresa al hogar.
- Planeen juntos: crear espacios para soñar y planear juntos mejorará la comunicación y proveerá una visión conjunta de hacia donde quieren ir como pareja. Los procesos de planeamiento en pareja son espacios ricos para que ambos se involucren en lo que el otro desea y lleguen a acuerdos del camino a seguir para alcanzar sus sueños. No hay momento más hermoso que aquel en el cual una pareja hace acuerdos mutuos de luchar por los sueños de ambos y poner sobre la mesa todo lo que tienen para alcanzarlos.
- Ejecuten en pareja: Hagan que sus metas y sueños se vayan cumpliendo paso a paso, pero háganlo juntos. Es importante que los dos estén en cada momento de esa construcción del estilo de vida que han elegido tener. Hacer cosas juntos provee a la pareja de un sentido de «trabajo en equipo», de «ser compinches», de ser «gente que está luchando por lo mismo» y esto fortalece muchísimo la relación de pareja y el uso adecuado del dinero.
- Asígnense un presupuesto para gastos personales a cada uno: a todos nos gusta sentirnos en libertar de comprar algunas cosas, o incurrir en ciertos gastos sin tener que estar dando cuenta a nuestra pareja. Ambos tienen que contar con un presupuesto para gastos personales discrecionales. El dinero que cada uno administre para este rubro deberá ser un acuerdo ya planeado y presupuestado previamente, sobre el cual ninguno de los dos deberá pedir cuentas al otro. Este hábito, le permite a los miembros de la pareja sentir la confianza y la seguridad para desarrollar su vida sin el temor de ser observado o cuestionado por el otro. Libertad y confianza son dos muy buenos hábitos que toda pareja debe practicar al administrar sus finanzas.
- ¿Cuánto es suficiente?: Como pareja deben establecer cuál es ese estilo de vida que quieren llegar a tener. Por ejemplo es importante definir con claridad qué cosas materiales quisieran adquirir, de qué precio, tamaño o marca. ¿Cuál es el nivel de ingresos ideal de la pareja?, ¿Qué tipo de educación quisieran proveerle a sus hijos?, etc. Establecer el nivel, es decir, ¿cuánto es suficiente? les dará un marco claro de hasta dónde quieren llegar y una vez alcanzado este nivel definir qué otros proyectos quisieran apoyar o cómo podrían servir a los demás. Todos debemos tener claro, el nivel de vida al que aspiramos y una vez alcanzado darnos por satisfechos. De lo contrario nuestra vida se convertirá en una continúa búsqueda y una insatisfacción permanente.
Vivir en pareja es una gran bendición desde un punto de vista económico. Como dice el verso bíblico: «Mejores son dos que uno, pues si uno cae el otro le levantará»… , pero demanda una serie de acuerdos y aprender a ceder para el beneficio del núcleo familiar y no del interés personal.
Tu amiga,